Seguros de Salud.

Los errores más comunes que hay que evitar a la hora de contratar un SEGURO DE SALUD tienen que ver con el grado de conocimiento de la Compañía Aseguradora, el desconocimiento del producto que se quiere contratar y el que se da prioridad al precio sobre los servicios.

Los errores más frecuentes  a evitar en la contratación son:

DECIDIRNOS SEGÚN LA OFERTA QUE NOS HACEN:
Cada Compañía utiliza los medios de comunicación para hacer anuncio de sus ofertas. Contratar impulsivamente sin otros estudios previos puede hacer que cometamos un grave error.

NO SABER LO QUE REALMENTE NECESITAMOS:
Existen muy variados seguros de salud. Es necesario reflexionar sobre qué necesitamos para poder decidir entre todos ellos.

NO CONOCER LOS SERVICIOS QUE LA COMPAÑÍA OFERTA y CÓMO OBTENERLOS:
Conocer los servicios que estamos contratando tanto en nuestro entorno más cercano como en el más lejano nos evitará conflictos futuros. No todas la Compañías ofertan los mismos servicios o coberturas y los proporcionan de diferentes modos.

EL PRECIO ES QUIEN DECIDE:
El precio de un seguro de salud se calcula en función de dos variables principales: Coberturas elegidas y Edad del asegurado. Cada Compañía establece distintos tramos de edad para calcular el precio del seguro. Durante las anualidades de cada tramo no habrá diferencias significativas en el precio de cada una.
Existen seguros sin copagos y con copagos siendo éstos más baratos. El copago es lo que el asegurado, además de la cuota ordinaria, debe pagar por cada servicio recibido. Es bueno sopesar si la diferencia de cuotas entre las dos modalidades merecerá la pena según la frecuencia con que solemos utilizar los servicios o previsiblemente lo haremos en el futuro.

NO REVISAR LOS PERIODOS DE CARENCIA:
Es muy frecuente que cuando contratamos no estemos informados sobre los periodos de carencia. Durante el periodo de carencia no están cubiertos determinados servicios. No todas las Compañías coinciden en estos plazos.

NO LEER LAS EXCLUSIONES:
Todas las Compañías contemplan una serie de circunstancias en las que no se podrían aplicar las coberturas del seguro. Es bueno conocerlas antes de decidirnos.

NO SABER EL PERIODO DE VIGENCIA DEL SEGURO:
Existen Compañías en las que la póliza contratada se mantendrá en vigor de forma vitalicia y otras en que esto no es así.

NO CONOCER LA COMPAÑÍA ASEGURADORA:
Existen en el mercado muchas ofertas de diversas Compañías. Antes de decidir hay que cerciorarse de que vamos a asegurarnos en una Compañía solvente y de reconocida reputación en el SEGURO DE SALUD. Que una Compañía sea maravillosa en Autos, Hogar, ..etc, no significa que también lo sea en SALUD. Hay Compañías que se dedican específicamente, de forma casi exclusiva, al SEGURO SALUD.

NO VALORAR LOS SERVICIOS COMPLEMENTARIOS:
Algunas Compañías ofrecen a sus asegurados una serie de servicios ajenos a la letra del contrato que pueden resultarte útiles.